Our attorneys have been assisting the Orange County and Southern California communities for over 40 years.
Julio Maldonado se hizo residente permanente legalmente admitido en EE.UU. cuando tenía 3 años de edad y mantuvo ese estatus por 39 años. Estaba comprometido para casarse con una Americana y toda su numerosa familia está aquí en este país. Hasta la fecha del incidente que finalmente resultó en su deportación, él no tenía record criminal. Muchos expertos legales y aún el Juez en el caso criminal cuestionaron si el Sr. Maldonado y su primo eran verdaderamente culpables de algún crimen.
En 1996, el Sr. Maldonado y su primo, Dennis Calderon caminaban por el vecindario para ir a tomar una cerveza. Registros de la Corte indicaban que “una pandilla de jóvenes blancos que estaban tomando cerveza en la calle empezó a gritarles epítetos raciales y a lanzarles botellas.” El ataque acabó en una pelea. Aún los testigos del fiscal testificaron que varios hombres blancos patearon y apuñetearon al Sr. Calderon mientras él permanecía en el suelo indefenso. Se dijo que el Sr. Maldonado sacó de su carro un seguro metálico de volante para defender al Sr. Calderon. Se dijo que un hombre blanco llamado Christian Saladino corrió hacia los atacantes. Los fiscales dijeron que el Sr. Maldonado golpeó al Sr. Saladino en la cabeza haciéndolo caer en coma. Los fiscales dijeron que el Sr. Calderon se levantó después, consiguió un bate de béisbol en su casa, y lo usó para golpear al Sr. Saladino.
El Sr. Maldonado dijo que él solamente “rozó” el hombro de Saladino porque tenía un cuchillo. Calderon negó golpear a Saladino con el bate. Sus abogados les aconsejaron que aceptaran que un juez decidiera el caso en lugar de un jurado. Estos abogados ni siquiera utilizaron a un experto médico para oponerse a las conclusiones del fiscal. El Juez, Gregory Smith reconoció que los primos tenían justificación en el uso de la fuerza. El Juez los condenó porque Saladino no era un atacante y fue imprudente golpearlo. Ambos fueron condenados por asalto agravado que bajo una ley de inmigración de 1996 requiere su deportación. Saladino murió 2 años más tarde y los dos primos fueron enjuiciados por cargos de asesinato. Un experto en medicina forense testificó que no había “ninguna evidencia que Maldonado o Calderon hayan golpeado a Saladino con alguna cosa o que contribuyeran con su muerte.” Señaló que si alguien fuera golpeado en la cabeza con el objeto que utilizó Maldonado, dejaría una marca visible y no había marcas en Saladino.
El experto médico también testificó que Saladino sufría de una enfermedad sanguínea que le causó una fatal hemorragia espontánea. Maldonado y Calderón fueron absueltos de los cargos de asesinado y el Juez Smith rescindió el veredicto de culpabilidad por asalto agravado. Ordenó un nuevo juicio en ese caso diciendo que si él hubiera escuchado el testimonio médico podría haber sentenciado diferente la primera vez. Infortunadamente para los primos, el fiscal no esperó un nuevo juicio sino que apeló la rescisión del veredicto culpable del Juez Smith. La Corte de apelaciones estuvo de acuerdo con el fiscal y reinstaló el veredicto de culpabilidad. Después de servir 8 años en prisión por algo que probablemente no hizo, Julio Maldonado fue deportado. Dennis Calderón también sería deportado después de cumplir su sentencia en prisión.
¿Cómo puede pasar esto en el sistema legal Americano? Dos residentes legales obedientes de la ley con registros limpios son atacados por racistas, sirven muchos años en prisión y son deportados. Los atacantes racistas nunca fueron acusados de ningún crimen. ESO es el crimen.
JESS J. ARAUJO, ABOGADO